El uso de la prótesis ocular en pacientes con previa enucleación o evisceración será prácticamente de 24 horas, quitándola en un principio todos los días para su limpieza.
Los primeros días de la adaptación, es muy importante lubricar la prótesis de forma periódica con colirio, para evitar la sequedad ocular. A medida que la prótesis se va adaptando a la cavidad, la secreción lagrimal se irá regulando, pudiendo espaciar en el tiempo la limpieza de la misma, no dejando pasar más de una semana para la limpieza oportuna de la prótesis.
Aquellos pacientes usuarios de cascarillas esclerales, deben removerla durante las noches, para que el globo ocular respire.